Uxue a finales de los 50 era un pueblo de unos 1200 habitantes.
Familias enteras emigran en busca de mejor vida y entre la gente que queda en el pueblo se apodera la desazón por no ver un futuro mejor sin salir de él.
En 1964 yo tengo once años. Una descomunal campaña publicitaria del régimen proclama a bombo y platillo y a todas horas sus `25 años de paz´.
Ujué, pueblo eminentemente agrícola, se halla atareado en las labores de la siega.
-¡Que va a venir un ministro a Ujué!
¡ Que han avisau al ayuntamiento que viene un ministro de Franco! Manuel Fraga, el de Información y Turismo..
La gente se hace mil preguntas:
– ¿ Pa qué viene el ministro? ¿Será pa arreglar la carretera? ¿Pa dar dinero pa empedrar las calles? ¿ Pa poner alguna fábrica? Por aquí también habían buscau petróleo…¿Que planes tendrá Fraga Iribarne pa Ujué?
Todos se callan para oir a Feli el aguacil que con su potente y clara voz pregona un bando de ayuntamiento:
– Don Porfirio Ayesaaaaaaa alcalde de esta villaaa hace saber: Que ante la visita del ministrooo, todas las calles estén limpiaaaas y que todos vayan al recibimieeeento….
La víspera del acontecimiento todo queda reluciente y listo para que el Señor Ministro se pueda pasear por todo el pueblo.
Para asegurarse que todo va a permanecer limpio se ordena que el día de la visita nadie saque sus vacas y caballerias de casa y que nadie entre con los ganados en el pueblo, no sea que ensucien las calles con sus carajones y moñigas. Los patos y gallinas que no salgan a la calle. Los perros tampoco.
Manolo, el cabrero del ayuntamiento, regresará con la cabrería después de que se vaya el ministro para evitar que las cabras de los vecinos, que suelen ir solas a sus casas, ensucien la calle con sus cacarrutas.
Todo en orden. Todo dispuesto.
Y al fin llega el día y la hora señalada: Sábado cuatro de julio, siete de la tarde.
Toda la gente se reúne arriba del todo, en la Placeta, que aunque es tiempo de siega y de trilla allá hay que estar:
-Que Fraga es un ministro de Franco y si no vas a recibirlo, igual te lo echan en cara.
Gran espectación. Cohetes. Gambarte el caminero es el encargado de tirarlos. En un descuido el fuego de uno de ellos prende en varios cohetes que tenía bajo el sobaco y salen disparados pa tó los laus quemándole la chaqueta.
El susto se pasa. Comienza a llegar la comitiva. Primero unos motoristas de la Diputación, luego un coche reluciente de donde salen unos señores mu elegantes.
Más motoristas, éstos de la Guardia Civil.. otro cochazo, y otro y otro….
Comienzan los vivas.. los aplausos..Todo el mundo aplaude. Más coches oficiales. Las cámaras del No-Do grabando.. Las de Televisión Española también. Hay que aplaudir pa que se vea en el cine y en la tele que todos los de Ujué semos del bando de los buenos.
Porfirio Ayesa, el alcalde, vestido de traje y corbata, saluda a todos los señores que llegan.. Las campanas de la iglesia voltean como en las fiestas grandes.. Gambarte sigue tirando cohetes…
Suben a la iglesia y al rato vuelven a bajar.. Más vivas, más aplausos.
La comitiva se encamina y baja hasta el ayuntamiento. Cuando todos los señorones están dentro..rias.. cierran las puertas.
Las autoridades son agasajadas con un extraordinario tentempié a costa de los ujuetarras y según dicen al ministro se le regalan unas almendricas de Ujué y otros recuerdos.
El pueblo espera afuera y cuando salen los mandamases, más y más aplausos.
En menos de diez minutos ya se han ido todos porque ya son las ocho y los esperan en Pamplona a las nueve.
Todo lo relatado ocurre en menos de una hora.
La gente del pueblo se queda con la sensación de visto y no visto y de haber sido manipulados.
Gambarte con la chaqueta quemada sin que nadie nunca jamás le idemnice por ella.
Y de las mejoras que se suponía que el ministro iba a traer, pues nada de nada.
Colofón:
Año y medio más tarde de su visita, a causa de una famosa Ley del ministro Fraga, Radio Santa Maria la Real de Ujué, nuestra entrañable emisora parroquial tuvo que cerrar. Hala. Para que nos acordemos del ministro. Sí señor..
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SIETE Y CUARTO DE LA TARDE DEL 4 DE JULIO DE 1964.
Otro día visitaría Puente la Reina y Estella e iría a la sierra de Urbasa y a Zudaire.
Fraga tiraría el cohete iniciador de las fiestas de San Fermin. Tras el cohete las peñas le obsequiaron con una placa y un pañuelico.. Faltaría más!
Al día siguiente estuvo viendo el encierro, en la procesión del Santo y en la corrida.