Nuevo “parto” del gobiernillo navarro
En la presentación en sociedad de la nueva criatura por parte de los orgullosos progenitores, éstos soltaron alguna perla que otra. Por ejemplo afirmaron:
1ª. Que hay cosas a las que el “memo sapiens ma non troppo” tenemos vetada la opinión (sobre todo algunos): “no todo es opinable” dicen.
2ª.- Que solo ellos pueden escribir sobre historia: “la historia no puede escribirla cualquiera”. (Es más que evidente que la definición de “cualquiera” según estos iluminados es la de: aquel que no coincida con mis prejuicios políticos. Por lo demás una falacia Ad hominen camuflada).
3º. Sólo ellos aportan “mucho” científicamente: “colectivos como Nafarroa bizirik o Nabarralde aportan poco científicamente”, aclaran (ya me gustaría a mi saber que entiende este “ganao” como ciencia)
4º. Que es un libro elitista pues: “es una obra destinada preferentemente al público culto” (entendiendo como culto a todo aquel que comulgue con sus prejuicios políticos).
5º. Que están muy capacitados para confeccionar libros de texto: “Esta obra está destinada a quienes enseñen historia de Navarra” (Otro argumentillo de autoridad, dime de que presumes y…)
6º. Por supuestito, ellos no son anticuados, ni estériles, ni esterilizantes, ni frustrados: “el libro es útil para superar debates anticuados, estériles y esterilizantes que resultan frustrantes”. (Como vemos, solo sus opiniones valen)
7º. Que evidentemente, solo ellos están en posesión de la verdad absoluta. “Es un libro definitivo” (que “define” claramente su interpretación y/u opinión de la historia, vamos); “el libro esta hecho con los mejores historiadores que había”. Vamos, que los Adot, Sorauren, Sagredo, o Esartes morralla pura, como el subsuelo de la plaza del castillo (la típica falacia de autoridad, se repiten bastante con ella, exceso de ego, quizás).
Y como están en posesión de la verdad (revelada por la “obra” imagino) no se empachan cuando afirman:
“Navarra se insertó en castilla tras una conquista bajo condiciones”. Efectivamente Sir, las que impusieron los vencedores.
“Navarra se insertó en Castilla pero conservando su personalidad”. Imagino que se refieren al pimiento del piquillo, las truchas con jamón, la jota, las alubias de sangüesa y al quesico del Roncal.
Parece que hemos añadido una palabreja mas al debate estéril éste; a partir de ahora hablaremos mucho de la famosa “inserción” de Navarra en Castilla.
Publicado por Nabarralde-k argitaratua
