Las explicaciones de Jon Juaristi

Ahora que las cartas empiezan a ponerse boca arriba, los que se han divertido horrores en los tiempos más duros (y siguen siéndolo) se ven en la necesidad de dar explicaciones.

El domingo, en «ABC», Jon Juaristi aprovechaba la ventana que le ofrece el rotativo que más se lee en los cuarteles para tratar de limpiarse la cara y echarle también una mano a su colega Savater.

Decía Juaristi que «según los partidos y medios de prensa nacionalistas que exigen del lehendakari López mi destitución como vocal del Consejo Asesor del Eusquera, la hostilidad que profeso hacia dicho idioma quedaría probada por algo que solté hace cuatro años en una entrevista radiofónica: El eusquera no es mi lengua. Su futuro me resulta indiferente». Pues a mí me parece suficiente semejante declaración de principios para que se vaya a paseo.

Pero a Juaristi le parece que «confundir indiferencia con hostilidad es de paranoicos» y que «la frase en cuestión contestaba a una pregunta del entrevistador de Radio Euskadi acerca de lo que yo sentiría si el eusquera se extinguiese. Pues nada, le dije. Si tal cosa llegara a ocurrir, sería porque vosotros, los que lo habláis y vivís de ello, habríais decidido dejar de

hacerlo, por aburrimiento o por declive económico de vuestra mamandurria. Por mí, como si te operas, Contreras». A mí tampoco me importaría un bledo si Juaristi se extinguiera, pero por lo menos no soy su asesora en materia de salud.

Juaristi muestra, además, signos de un cierto desequilibrio. A ver si ustedes le entienden: «Frecuentar apriscos clandestinos donde cabras menores de edad son obligadas a prostituirse no es bueno para el espíritu. Los nacionalistas deberían buscarse otras formas de ocio. Volver a las sanas tradiciones de nuestros antepasados (partir troncos con hachas de sílex, romper peñascos a cabezazos, lanzar relinchos intrépidos desde la cumbre del Gorbea y deportes por el estilo). No sólo mejorarían su salud, en general, sino el sentido del humor. Serían más comprensivos con mi indiferencia ante el futuro del eusquera o con el hecho de que Fernando Savater reconozca que se lo ha pasado bomba, con perdón, combatiendo a ETA». ¿Este le va a asesorar a Patxi López? ¡Jo que tropa!

 

Publicado por Gara-k argitaratua