Luis Ordoki, Anika Luján, Oskar Zapata y Reyes Ilintxeta, participantes en un debate sobre el vasquismo en Navarra a iniciativa de este periódico.
¿Cuál es el vigor del arraigo de la identidad vasca en la Navarra actual? Cuatro euskaltzales para un balance y reflexión sobre los nuevos pasos que son necesarios dar.
Debate sobre la conciencia vasca en Navarra con cuatro participantes: El abogado Luis Ordoki, jubilado, extrabajador de la Cámara de Comptos, y ahora ensayista; Anika Luján, profesora en Argia Ikastola; Oskar Zapata, director de Topagunea en Nafarroa, y la periodista Reyes Ilintxeta, trabajadora de Euskal Herria Irratia, una de las responsables de la revista Ze berri? y colaboradora en este periódico y en Argia. Tanto Luján, como Zapata e Ilintxeta forman parte del Consejo Navarro del Euskera. Hablamos de identidad, sentimiento y conocimiento, de lengua, cultura, y política, que decide y legisla sobre los asuntos públicos. En el caso del euskera, coinciden, constreñido en una zonificación con perniciosos efectos sociales y bajo la fricción de un potente relato distorsionador.
–Oskar Zapata: El número de personas a favor de la rehabilitación del euskera ha crecido según las últimas encuestas. Ese dato positivo podría haber sido mucho mejor. En los inicios del Amejoramiento, cuando se dijo que habría una zona no vascófona, se estaban planteando barreras impuestas por decisión política. Pensando en alguien que se apellida Iribarren, que juega en el Azkarrena de Caparroso… Podían haberla llamado zona menos vascófona, pero se marcó una barrera que no ha ayudado a la expansión del euskera. Tres zonas en una comunidad que tiene que vivir junta y debería hacerlo en armonía al final trae enfrentamientos. La intencionalidad política, clara, no ha ayudado a la convivencia entre las diferentes identidades y culturas, que podían estar mucho más integradas.
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–Anika Luján: En general el euskera en la Ribera se considera ajeno. En los ochenta sí había una conciencia, ahora se está perdiendo mucho. El foco lo coloco en el 86, en la que llamaron Ley del Vascuence. Si hay algo que de verdad ha roto o dificultado la convivencia en Navarra ha sido esa ley. Porque ha fracturado, ha pretendido decir lo que teníamos que ser cada uno, cómo vivir en nuestro sitio. De una raya para abajo no te corresponden unos derechos, no se pueden ejercer. Navarros de primera y de segunda. ¿En qué comunidad se ha visto que unos puedan elegir y otros no?
–Luis Ordoki: Hemos vivido bajo dos lemas irreconciliables que afectan al vasquismo. Arrojadizos, de trincheras. Todavía en menor medida esa realidad sigue presente. Navarra foral y española como excluyente de todo lo vasco. Nafarroa Euskadi da como excluyente de comunidad foral diferenciada, con sus rasgos de personalidad aplicados como debe ser, no como se están aplicando. Navarra es la única comunidad que teniendo lengua propia ha fraccionado la oficialidad y su uso en el territorio. Un problema que viene del Amejoramiento. Cómo es posible que el mayor tesoro cultural de Navarra se haya troceado de esa manera. No me cabe en la cabeza. Me parece lamentable. Cómo hay navarros que no están orgullosos de ese patrimonio que tenemos. En ocasiones se fomentan esos dos lemas cuando ninguno responde a la historia. Ni Navarra tiene que integrarse por obligación en Euskadi, ni entre Navarra y las Vascongadas no hay unos lazos y relaciones súper especiales mucho mayores que con cualquier otra comunidad. Navarra ha sido una entidad propia durante mil doscientos años con las provincias vascongadas o sin ellas, con Baja Navarra o sin ella. La Comunidad Foral que hoy es responde a esa historia. Lo deseable sería un mayor nivel de cooperacion para defender los múltiples intereses comunes que comparten Navarra y la CAV. Cuando solos no somos nada y estamos llamados a colaborar en el futuro y a unirnos a los que seguramente en muchas cosas lo están haciendo mejor. Todavía el tema vasco en Navarra está polarizado. Habría que intentar salir de esta rueda buscando alternativas. Tampoco la Constitución planteó más que la posibilidad de incorporación a Euskadi sí o no. Sin otras fórmulas que hubiesen suscitado más consenso, de asociación o federación vasconavarra, como antes era lo normal en muchos ámbitos, como que la derecha navarra asumiese lo vasco. Hoy día ha roto con el vasquismo, y esto es un fenómeno de hace 40 o 50 años. Cómo es posible que se haya posicionado contra el euskera y tire piedras al tejado de Navarra.
“La derecha navarra asumía lo vasco. Desde hace 40 o 50 años, ha roto con el vasquismo”
LUIS MARI ORDOKI URDAZI – Abogado jubilado y ensayista
–Reyes Ilintxeta: Todo responde a una estrategia muy bien planificada, con consecuencias. No es producto ni de la casualidad ni de una deriva natural. Se ha fraguado en determinados momentos. La derecha, apoyada en gran parte por el Partido Socialista, ha decidido sacrificar el euskera y su cultura en favor de tener un mayor poder político. Ese sentimiento vasconavarro que hemos tenido durante toda nuestra historia ha desaparecido. UPN nace para contrarrestar ese sentimiento o tentación que pueda tener la población de unirse al País Vasco, y ha llegado a ser principal formación de Navarra; está claro que es una estrategia sabiendo sus consecuencias, las que estamos viviendo ahora, todas estas cortapisas que se ponen al desarrollo del euskera. Sin piedad, a machete. ¿Quiénes las estamos sufriendo más? La gente que quizá vemos el sentimiento vasconavarro no tanto como objetivo político, sino social o cultural.
–Anika Luján: Acordaros del PAI, aquello sí que se impuso, y Yolanda Barcina vino a traslucir en una televisión madrileña que se había gestionado así para debilitar el modelo D.
–Reyes Ilintxeta: Toda esa estrategia creada y fabricada a nivel político ahora se va extendiendo a nivel social. Así como al estar zonificados nos lo creemos, va calando también en la sociedad esos sentimientos. Lo preocupante es la cantidad de gente que está en contra de la promoción del euskera, que cada vez va creciendo un poco más, fustigada por todos esos mensajes que vienen de las altas instancias.
–Anika Luján: Ves cosas como por ejemplo una exposición. El cartel está en euskera y en castellano, llega esa exposición a Tudela y se gasta dinero para hacer unos carteles solo en castellano. Una cosa es que no sea obligatorio que vaya en euskera, pero no está prohibido. Y se toma casi como una prohibición. Por ver unas palabritas no te van a robar el alma.
–Reyes Ilintxeta: Pero para algunos el euskera mancha, y hiere. Algunos reivindican a vivir como si no existiese.
–Anika Luján: El derecho a no verlo.
–Oskar Zapata: Cuando en Europa se pone en valor la diversidad cultural y lingüística, donde se entiende que la sociedad se hace así mucho más rica, culta e integradora, aquí hay planteamientos de no querer ni apoyar la diversidad cultural propia que tiene Navarra como comunidad diferenciada. ¿A dónde vamos si no ponemos en valor esta diversidad? Una ley que dice que una zona es no vascófona, lo primero que busca es evitar el contacto con esa cultura y el euskera. Si escondes una cosa o haces que no se conozca, creas rechazo a lo desconocido. Si encima se utiliza desde los medios de comunicación por agentes políticos para que siempre sea un tema conflictivo, crea confrontación.
“La llamada ‘izquierda no nacionalista’ tampoco ha contribuido mucho a que el euskera se normalice”
ANIKA LUJÁN MARTÍNEZ – Maestra y licenciada en Historia
–Reyes Ilintxeta: Se busca el conflicto, y además es muy rentable en votos. ese es el problema. En este contexto globalizado las lenguas pequeñas tenemos todas las de perder, por mucho que nos empeñemos en llevar a la práctica mil cosas, y de hecho vamos perdiendo poco a poco. Estamos en peligro de extinción, es así. Y los políticos que están en contra del euskera lo saben. Y saben que la gente hoy día que habla euskera en Navarra o es afín al euskera no les va a votar. Eso que no ocurre en la CAV.
–Luis Ordoki: Ni en ningún sitio.
–Reyes Ilintxeta: Por eso, hay gente de derechas que habla lenguas minoritarias. Aquí si hablas euskera ya no te conciben como de derechas.
–Luis Ordoki: ¿Cuáles son las causas de que haya unos poderes fácticos en contra del euskera y se haya producido ese viraje? ¿Ha tenido que ver la configuración de la Comunidad Autónoma Vasca, que se ha hecho heredera de lo vasco? Todo el mundo identifica lo vasco con la CAV. El artículo primero del Estatuto vasco es el Pueblo Vasco o Euskal Herria se constituye en Comunidad Autónoma. Me parece que se pasaron de frenada. Puede ser una causa la actuación de ETA. Conozco gente de Baztan y de Ultzama que renunció a hablar en euskera, porque lo asoció con la violencia, también la ignorancia de nuestros partidos, políticos e instituciones. Hay causas más allá de unos poderes fácticos, pero ¿por qué Navarra es el único caso en el que gente que se apellida con diez apellidos vascos está en contra de lo vasco? Mirando al futuro hay que hacer muchas cosas en el plano legislativo. Cambiar la Constitución, el Amejoramiento, la Ley del Euskera y el Estatuto vasco. Hacer una labor didáctica descomunal de trasladar que el euskera forma parte de nuestra médula, en colegios, universidades, medios de comunicación. Se ha hecho labor al revés estos 40 años.
–Anika Luján: Los socialistas tienen una manera de actuar totalmente diferente aquí que en Catalunya o Baleares. El nicho principal del PSN lo tiene en el sur de Navarra. Pero nunca mencionamos a quienes se autodenominan ‘izquierda no nacionalista’, que son nacionalistas de otro lado.
–Reyes Ilintxeta: Todo el mundo es nacionalista, de una nación o de otra.
–Anika Luján: Esa izquierda tampoco ha contribuido de manera muy profunda a que el euskera se normalice. Y nunca la metemos en la ecuación. Podemos Ahal Dugu o Izquierda-Ezkerra a la hora de la verdad en el Parlamento se implican poquito.
–Oskar Zapata: La realidad sociolingüística que tanto se invoca no es estanca, se puede cambiar a través de una política lingüística. Durante cuarenta años esta política ha ayudado a que haya menos afección al euskera y zonas en las que les es ajeno.
–Luis Ordoki: La zona vascófona solo incluye al 10% de la población de Navarra. ¿Cómo vas a conseguir promover el euskera, objetivo en teoría de la ley del euskera, cuando solo lo haces oficial para ese 10%?
–Reyes Ilintxeta: Y en pleno siglo XXI, en el que las barreras o fronteras tienen menos sentido que nunca.
–Oskar Zapata: Si seguimos buscando nuevos aliados, discursos y prácticas que ayuden a que haya más gente a favor de la promoción del euskera, tenemos mucho que compartir en valores con muchos actores políticos y sociales que trabajan en Navarra, para quienes el euskera no es una prioridad, pero cuando se les pide apoyo normalmente tienen una sensibilidad. Con ellos debemos hacer un ejercicio de empatía mutua. Al fin y al cabo hablamos de intentar hacer una sociedad más inclusiva y amable para todo el mundo en Navarra. La convivencia se tiene que basar en integrar todas las sensibilidades.
–Luis Ordoki: Hay que poner en valor la historia de Navarra, nuestro patrimonio artístico, cultural… es que es mucho más que la lengua. Hay mucha gente que no sabe euskera pero que ama la lengua, porque impregna apellidos y toponimia. Curiosamente, desde el Amejoramiento del Fuero Navarra se está despersonalizando a pasos agigantados. Antes era la comunidad con más autogobierno, hoy día nos pasan varias. Antes todo el mundo estaba de acuerdo con el régimen foral. Hoy preguntas por ahí a cualquiera y les da lo mismo Navarra que La Rioja que Santander, todos somos iguales. Oiga, no, que esto fue un reino. Y falta una visión estratégica de nuestro futuro. Tendríamos que estar de acuerdo en cuatro cosas básicas, un mínimo común denominador, porque si nos pasamos el día discutiendo de tonterías esto no avanza, y nos están pasando por goleada otras comunidades. ¿Eso no lo ven nuestros gobernantes?
“La derecha, apoyada en gran parte por el PSN, ha decidido sacrificar el euskera por más poder”
REYES ILINTXETA JIMÉNEZ – Periodista
–Anika Luján: La mayor parte de la gente no tiene la sensación de que ha perdido esa identidad, solo que a lo mejor la representa a través de otro imaginario.
–Luis Ordoki: Porque estamos anestesiados, no se estudia en los colegios ni en las universidades, no se pone en valor la historia, la lengua, el patrimonio ni la personalidad.
–Anika Luján: Hay muchos sentires, el tema es más difícil.
–Oskar Zapata: Imagínate que las decisiones políticas tomadas en los inicios del Amejoramiento hubiesen dicho como el euskera es una riqueza cultural, vamos a hacer que toda la población en edad escolar estudie lo suficiente como para entenderlo. Qué ejercicio de convivencia habría sido. Ahora que es totalmente cercano para nadie sería ajeno, ni extraño.
En este punto, pedimos una impresión sobre las oportunidades y límites del escenario político actual o el de la legislatura anterior.
–Anika Luján: A lo mejor había más expectativa de lo que luego se llevó a cabo entre 2015 y 2019. La Administración es lenta, los cambios sociales también, no puedes ser elefante en una cacharrería. Había una mayoría parlamentaria que propició un cambio político pero no estaba de acuerdo en algunas cosas, por ejemplo en el euskera. Como comentaba, los obstáculos no solo vienen de UPN o PSN.
–Reyes Ilintxeta: Habría hecho falta más de una legislatura para poder sacar adelante algunos proyectos. Me preocupan las elecciones de mayo, no sé si los partidos que se encuadraron en aquel Gobierno del cambio tienen mucha fuerza. Si tienen gente lo suficientemente potente y atractiva como para atraer mucho voto. Veo en este momento un poco de debilidad. A ver si de aquí a mayo se rearman.
–Luis Ordoki: En estos temas tan importantes para la esencia y la identidad de Navarra no podemos estar mirando 26 escaños frente a 24. Porque esto cambia cada legislatura. Tendría que haber un consenso muy amplio entre los grandes partidos, incluido UPN, para intentar crear unas políticas estables independientemente de quien llegue al Gobierno. Apelo a un mayor grado de unidad de instituciones, partidos y ciudadanos en estas cuestiones, vitales para la supervivencia de Navarra, viendo además el futuro de inmigración y globalización. Siempre que los navarros hemos estado desunidos nos ha ido mal, porque otros han sacado tajada. Aunque parezca imposible y sea muy difícil, hay que intentar concienciar a la mayor base social y política.
–Oskar Zapata: Es necesario un consenso, pero tiene que ser sobre algo que favorezca la convivencia y la recuperación de la cultura, la integración de las identidades. No desde la negación de lo tuyo no vale. Porque ahí no puede haber acuerdo. Yo no tengo claro qué va a hacer en 2023 el PSN, ni de lejos. Sobre qué se va a construir la hegemonía. ¿Sobre un pacto con UPN o sobre el de ahora? ¿Con quién hará migas? Veremos.
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