Nueva acusación contra el independentismo. La consultora de inteligencia y geoestrategia ‘Instituto de Seguridad y Defensa’ ha publicado un informe en fecha dos de abril donde relaciona la crisis sanitaria con el independentismo. Con el título «Crisis del coronavirus: La desinformación del separatismo catalán como desafío estratégico para España», el analista Nicolás de Pedro, Senior Fellow de ‘The Institute for Statecraft’, acusa al independentismo «de aprovechar la crisis del coronavirus para avanzar en su proyecto».
La tesis de Nicolás de Pedro es que el independentismo con la crisis sanitaria «trata de deslegitimar la democracia española» a través de la internacionalización del proceso. Como ejemplo de esta idea para el analista es la entrevista al presidente Quim Torra en la BBC del pasado 19 de marzo. De Pedro, entiende que el coronavirus se incardina en una «cuestión estructural y estratégica» y debe detenerse porque, de lo contrario, «la ruptura del orden territorial no es en absoluto, un escenario que resulte inconcebible».
El informe de 18 páginas, basa gran parte de su argumentario en la tesis de la desinformación y en los mensajes en las redes de líderes políticos y sociales del proceso. Más o menos, como los atestados de la Guardia Civil contra el proceso. Así incluyen como prueba del relato de la desinformación del virus provocada por el independentismo por tuits sobre el coronavirus del ex-vicepresidente Josep Lluís Carod-Rovira, del concejal de la CUP en Vic, Joan Coma; de la tuitaire ‘Gallifantes’; de Michel Fanès -que definen como «independentista catalán francés»-; Mark Serra activista; Òmnium Cultural; del 3/24 o incluso, de la cuenta fake satírica «Xat de Sant Esteve de les Roures». También tuits de Gobierno o de consejeros como Miquel Buch o Jordi Puigneró.
El capítulo 3, titulado «Desinformación e internacionalización del proceso independentista catalán», el analista arguye que «el proceso no se puede entender sin su dimensión informativa». «El proceso ha tenido mucha simulación, impostura y ambigüedad, pero si algo ha quedado constatado en el último lustro es que las noticias falsas generan efectos reales», indica De Pedro. en este sentido, repite la tesis de la manipulación informativa, con una «hegemonía que se alimenta a sí misma promocionando y subvencionando a los afines y expulsando, progresivamente, a los disidentes».
En el relato del informe, vuelve a surgir la famosa «injerencia rusa», con detalles como la motivación que tenía el Kremlin en el proceso. Ahora bien, alerta que el «relato independentista ha penetrado con fuerza en la opinión pública internacional». Por ello reclama al Estado estar al acecho ante intervenciones del president Torra pidiendo la «intervención exterior» para detener el virus en Cataluña a través del confinamiento. Según su análisis buena parte del independentismo ha comprado la idea de que «el coronavirus viene y es culpa de Madrid». En este sentido, opina que «desde la Generalitat se está tratando de fijar en el imaginario nacionalista una narrativa insidiosa de tono conspirativo que puede envenenar la convivencia cívica, tratando, al mismo tiempo, de difundirla internacionalmente».
Como conclusión final, De Pedro pide estar atentos para comprobar cuál «es el impacto en la convivencia a medio y largo plazo» a raíz del relato independentista con el coronavirus. «No se puede ser muy optimista», reprocha e incluso, avisa que hay que «preguntarse si el tiempo y la demografía juegan a favor de España o del independentismo».
EL MÓN
