Ha sido
Cuando se utiliza la justicia con fines exclusivamente políticos, la deformación del estado de derecho llega a su máxima expresión, y de las decisiones judiciales emanadas de este sistema de justicia dependiente del poder político, parten las prohibiciones de partidos políticos, la anulación de listas electorales, el cierre de periódicos, la inhabilitación política de personas, el ninguneo de la cultura y la minimización del euskera, la duplicación de penas a los presos, etc.
¿Ha sido Arnaldo Otegi culpable de enaltecer el terrorismo, o de explorar las vías políticas y democráticas para resolver el conflicto político vasco?, según los fiscales españoles antes citados y
Muy preocupados se encuentran hoy los nacionalistas españoles, porque cuando se propone el dialogo, se desvanecen los argumentos de la violencia, y se desnuda una realidad que no se puede ya esconder bajo la alfombra: la debilidad de la pretendida unidad del Estado español.
Esta no es ni el primero ni último atropello a que estarán expuestos ciudadanos e instituciones vascas, ya clamarán a Dios los unionistas españoles, para que ocurra un atentado, un secuestro, o al menos una denuncia de amenaza, con el propósito de mantener en pie su único y débil argumento: la violencia
La respuesta a este dislate jurídico, debe ser el trabajo en común, la cimentación de las vías democráticas, el tejido de los mimbres necesarios para consolidar un espacio de izquierda soberanista, y la construcción de puentes y espacios de confianza entre quienes más allá de nuestras circunstanciales singularidades, apostamos por sumar a miles de vascos y vascas que quieran hacer una realidad el destino de grandeza de nuestra Nación.
Prof. César Arrondo/ Universidad Nacional de