Euskera, multas y Guardia Civil

Prácticamente todos los medios de comunicación se han hecho eco de la multa impuesta a un transportista alavés por poner la fecha del tacógrafo en euskera. Al respecto, me gustaría puntualizar que en casi todo el mundo se da a elegir el modo de especificar la fecha entre la fórmula año-mes-día o la fórmula día-mes-año. Si cualquiera compra una cámara fotográfica nueva, comprobará que la aplicación para insertar la fecha ofrece estas dos soluciones, a escoger por el usuario.

Da la casualidad de que los vascos y los anglófonos utilizamos la fórmula año-mes-día, lo que me lleva a preguntarme, entre otras cosas, si la Guardia Civil, cuando para a un transportista inglés, le multa por poner la fecha en vasco en el tacógrafo.

Asimismo, me pregunto si, con todas las reformas educativas que se anuncian y el proyecto para incluir el inglés como tercera lengua vehicular -término que, casualidades de la vida, deriva de vehículo-, la Guardia Civil también nos multará por poner la fecha de una carta en euskera o por ponerla en inglés.

En cualquier caso, está claro que la Guardia Civil, por lo menos los agentes de tráfico, no están para entrar en Europa (y no me refiero al espacio Schengen) ni en ningún otro sitio… aunque en Euskadi entraron -y aquí siguen- hace ya demasiado tiempo. Basta con echar un vistazo a los informes que han fabricado sobre Egunkaria y en otras muchas causas judiciales.

No me extiendo, aunque podría hablar largo y tendido sobre las maquinaciones de este instituto armado dispuesto, como dicen ellos, a darlo «todo por la Patria«. ¡Que se lo pregunten a Galindo, su general más condecorado! Se le juzgó y condenó, pero a él no se le ha aplicado la llamada doctrina Parot. Es más, el PSOE lo puso en la calle en 2004 sin cumplir siquiera una quinceava parte de los 75 años, con sus meses y sus días, de su condena.

 

Publicado por Deia-k argitaratua