Entrevista al filósofo Josep Maria Terricabras

«Lo ideal sería una Solidaritat Catalana independentista»

Con convicción y ganas de despertar conciencias, el filósofo Josep Maria Terricabras concluye que el autonomismo está en vía muerta y que es la hora de acordar una hoja de ruta soberanista. Aboga por una nueva Solidaritat Catalana como plataforma electoral unitaria o por un acuerdo previo de mínimos.

¿Las relaciones Cataluña-España están en un final de trayecto o en un episodio más de la pelea eterna?
Estamos en un final de trayecto, que no está concentrado en un punto ni se acaba enseguida. Bajar del tren y pasar toda la andén es un proceso un poco largo y difícil. Con todo, es obvio que con el tiempo cada vez más gente se da cuenta que no hay salida: hay que elegir entre el autonomismo y la soberanía. Y el autonomismo es algo cada vez más raquítica, recorte y miserable, que no satisface ni los deseos de aquellos que no son muy nacionalistas, que al final se dan cuenta que el independentismo es la solución. Todavía hay quien defiende el federalismo, pero, pobres, se toman como una solución de emergencia, porque saben que en España nadie es. ¿Como te quieres casar con alguien que no se quiere casar contigo? El federalismo es una ocasión perdida para España y una solución antigua. Habría podido dar, pero ya no.

¿El autonomismo está, pues, en vía muerta?
Sí. Es una vía muerta, con la gente dentro del vagón esperando, pero harta de él. La Renfe nos ha dado ejemplos terribles de ello, con viajes de Girona a Barcelona de tres horas, sin dar explicaciones, diciendo que te calles y no reclames encima. Esta es la vía autonomista que se está confirmando y que el TC acabará de remachar. Esto no puede satisfacer en ningún caso los empresarios catalanes, pero tampoco las universidades, ni la sociedad civil o los ayuntamientos. La dependencia exagerada de Madrid no deja respirar como se quisiera y eso lleva a la frustración de mucha gente.

¿La renovación del TC salvaría el Estatut?
No. El TC no me interesa nada, no haría ningún caso. No sé por qué se entretienen a pedir que se renueve. El TC ya no debería haber intervenido en esta operación, porque no le tocaba. No tiene ninguna legitimidad, sólo la que ellos se han atribuido, porque la Constitución no dice en ninguna parte que los estatutos deben pasar por el TC.

¿Habría que sacar alguna lección del espectáculo del Estatut en el TC?
La lección es literalmente penosa, de preguntarse cómo puede haber instituciones con toda la retórica jurídica que son de estricto control político. ¿Cómo puede ser que un TC que respetara un poco la diversidad del Estado sólo tuviera gente nombrada por el PP y el PSOE? Eso no ocurre en ningún país del mundo con una cierta formación plurinacional. Es tan perverso que no hay nada que hacer. La renovación del TC que con tan buena fe-con un candor impropio de políticos curtidos-reclaman CiU y el PSC es de una ingenuidad espantosa. Renovar el TC no quisiera decir nada, sino volver a empezar el proceso con gente que piensan del todo igual, elegidos por el PP y PSOE, contrarios al Estatuto.

¿Y de las consultas soberanistas de la sociedad civil que se ha de aprender?
Aportan lecciones muy interesantes. Una es que el soberanismo es un discurso normalizado, cuando hace 15 años hablar de independencia costaba. Es muy importante que sea una iniciativa salida de la base, que sobre todo sirve para crear debate en torno al soberanismo y conciencia nacional. La gente puede votar como ensayo de una posibilidad futura y pedagógicamente tiene mucha fuerza. Las consultas han puesto la agenda la independencia como una cuestión transversal. Pero en ningún caso soy partidario de ir a un referéndum de independencia oficial en la situación actual. Si me la ha de organizar el Estado español o un gobierno que no cree en la soberanía sino que pone bastones en las ruedas-el PSC, concretamente-es obvio que no lo ganamos. Hay una mayoría parlamentaria en Cataluña, que haga gobierno y desde el gobierno prepare la independencia y el referéndum. El ganaremos seguro.

¿Cómo ve la propuesta de la Coordinadora de la consulta de un referéndum oficial de iniciativa popular?
Tengo poca fe. Cualquier movimiento en esta línea tiene mi complicidad, pero como la ley de consultas requiere que dé permiso el gobierno español, sé que lo negará seguro, igual que no quiere renovar el TC. Jurídicamente la vía de la legalidad española está terminada.

¿Y cómo se consigue hacer la proclamación parlamentaria de la independencia?
Esta es la vía absolutamente democrática. Si el independentismo se presenta a las elecciones y tiene mayoría, luego tiene que actuar en consecuencia. La legalidad española se opondría, pero en Europa y el mundo de hoy, la decisión libre de los ciudadanos, si fuera mayoritaria, debería ser aceptada.

Hay un soberanismo emergente, pero muy dividido. ¿Quién lo rentabilizará?
Esto es lo más problemático y ahora es la hora de la generosidad política. Si de verdad hay grupos convencidos de que la independencia es una prioridad para organizar bien el país-en inmigración, economía, etc .- sería ideal que hubiera como una Solidaritat Catalana antigua, en la que se juntaran todos los grupos que están por la independencia. Es muy difícil porque hay demasiados personalismo y purismo entre los grupos, pero es el único que podría animar a la gente. Tendría un resultado espectacular y evitaría que se perdieran votos. El problema es que quizás algunos de los líderes actuales no serían los mejores reclamos y se habría gente nueva.

Esto es picar hierro frío …
Sí, pero hay que picar, porque a veces hay milagros … Si la coalición no fuera posible, sería necesario que antes de las elecciones los partidos hicieran un acuerdo sobre la hoja de ruta de la independencia, de manera que cada uno pudiera votar en función de sus preferencias sociales o económicas sabiendo que el camino lo tienen pactado. Y eso sí que debería poder conseguir. Y entre estos grupos hay ERC, sectores importantes de CiU, y Carretero, Laporta, la CUP … y muchos grupos.

Publicado por Avui-k argitaratua