El señor de las cadenas

El sábado iré a la inauguración del Centro de Interpretación de las Murallas de Pamplona con palomitas y una fanta de naranja. Es que yo voy sobre todo a ver el vídeo promocional del centro de unos 10 minutos de duración que van a estrenar el sábado. Circula por internet un tráiler de un par de minutos realmente espectacular. Me ha dejado impactado. Una orquesta interpreta música épica que parece compuesta por el mismísimo Ennio Morricone. Sobre un muro de piedra se va formando en letras doradas el lema Una ciudad con un pasado que descubrir. A partir de ahí, comienza un festival de espectaculares travellings y planos aéreos que nos muestran las murallas desde todos los ángulos posibles e, incluso, imposibles. La música sube en intensidad. Empiezan a aparecer intercaladas imágenes de soldados de época, explosiones y mapas antiguos, hasta que una enorme puerta de madera se cierra de golpe ante la cámara, con gran estruendo. De entre la polvareda levantada vuelven a surgir letras doradas para conformar la leyenda Pamplona plaza fuerte. Ese título final es lo único que me parece mejorable de todo el tráiler. Para que el paralelismo con las superproducciones de El señor de los anillos fuera todavía mayor, yo habría puesto El señor de las cadenas. De hecho albergo la esperanza de que el vídeo en su versión extended play explique la realidad navarra al estilo Tolkien. Espero una grave voz en off diciendo algo así como «En el Viejo Reyno de la Tierra Media navarra, el todopoderoso Morgoth Sanz, señor de las cadenas, cede su puesto a su lugarteniente, Sauron Barcina, bajo la envidiosa mirada del Nazgul Cervera. Al mismo tiempo, Saruman Jiménez el Blanco se alía con su supuesta enemiga Sauron Barcina para compartir el control del Viejo Reyno. Los VAralar, Sindar Batzoki, Elfos Alkartasuna y Hobbits Batasuna luchan por arrebatarles el poder, pero la maldición de Aitor los mantiene enfrentados entre sí, aun compartiendo entre ellos el amor por un idioma élfico denominado euskera. Esta es la historia del Viejo Reyno de la Tierra Media navarra, tanto ayer, como hoy». Dicho de otra manera, el Centro de Interpretación de las Murallas me parece una idea interesante, pero cada vez me gusta menos toda esta rancia parafernalia historicista desplegada en torno a la marca Reyno de Navarra.

 

Publicado por Noticias de Navarra-k argitaratua