EL Papado en aquella época fue un mero título político-nobiliario controlado por clanes familiares, con poca tarea para el Espíritu Santo en el nombramiento de los Papas. Señalo unas pocas actuaciones, podrían ser muchas más, de aquellos Papas, que hicieron lo que estuvo de su parte para influir en la invasión de Navarra.
Inocencio III nombró a César Borgia, joven de 16 años (hijo ilegítimo del que después sería el papa Alejandro VI), obispo de Pamplona, a pesar de la oposición de los Reyes de Navarra que no lo vieron conveniente.
Alejandro VI que tuvo cuatro hijos de Vanesa Cataneri, dio el título de Reyes Católicos a Fernando e Isabel por haber expulsado a moros y judíos y les concedió el Patronato Real con el derecho de invadir tierras y continentes, América o Navarra, por ejemplo. Vendía capelos cardenalicios y envenenaba a sus contrincantes. Tuvo enfrentamientos con los Reyes de Navarra como en la provisión del Obispado de Pamplona y en la prestación de juramento de obediencia que se venía imponiendo a los monarcas y a las instituciones navarras.
Julio II de los Médicis fue el verdugo de Navarra. Tuvo tres hijas ilegítimas, era violento y avaro, y el nepotismo, su práctica habitual. Traficaba con bulas e indulgencias. Con su consentimiento Fernando el Falsario manipuló bulas falsas para que los Reyes de Navarra apareciesen como rebeldes al Papado y con esa excusa se justificó la invasión de nuestro reino.
León X fue tonsurado y elegido clérigo a la edad de 8 años y desde niño fue preparado para ocupar puestos importantes en
Adriano VI eligió al italiano Juan Pogio como obispo de Pamplona.
Los Papas sucesivos: Clemente VII, Paulo III y IV, Pío IV y alguno más intervinieron en Navarra y normalmente en sentido negativo. No quisieron permitir que Navarra pasase de Estado medieval a un Estado moderno; se opusieron al humanismo y aperturismo de los Reyes de Navarra que chocaba claramente con
Difícil resumir en esta breve reseña las mil tropelías que estos Papas nefastos cometieron contra Navarra. Curiosamente,
Se nos ha hecho perder la memoria histórica de lo que fuimos, de lo que pudimos llegar a ser y que no nos lo permitieron ni España, ni Francia y siempre con la ayuda del corrupto Papado.
Historiadores, escritores y cineastas navarros encontrarían en aquellos años personajes apasionantes (Pedro de Navarra, Margarita de Navarra, Juana de Albret, Margarita de Valois, Martín Azpilicueta o Bartolomé de Carranza por destacar algunos) y también temas bien interesantes. Nos recordarían momentos importantes de nuestra historia que, con muy mala intención, se nos ha hecho olvidar.
Publicado por Noticias de Navarra-k argitaratua