Dicen que ya hay quien ha bautizado el 25 de octubre el día del Estatutus-Quo, que podría valer también para el seis de diciembre porque en ambas fechas los unionistas celebran lo mismo: las normas fundamentales que garantizan el statu quo. Para los celebrantes,
Dicen que Alberto Surio, a quien gente malvada empieza a llamar «Censurio», enmarcaba en «un proceso natural de conformación de nuevos equipos los relevos de editores de informativos en EITB. Dicen las gentes malvadas, poco de fíar, que Surio miente descaradamente presentando los ceses como un proceso natural de cambios de ciclo y que ya es jeta decir que las editoras llevaban cerca de una década en esa responsabilidad. Dicen que a «Censurio», como le llaman los malos, se le olvida decir que esas mismas editoras depuradas habían sido ratificadas y, en algún caso, promocionadas y refortalecidas por la actual Dirección de cara al nuevo curso recién iniciado. Dicen, por tanto, que los cambios que se podrían calificar de «naturales» ya se habían producido. Y que también ha habido algunas continuidades anti-natura.
Dicen que en el proyecto de presupuestos para EITB se propone la figura del corrector de estilo para marcar el lenguaje y las noticias. Para que luego digan que no crean puestos de trabajo, dicen.