Muchas cosas. ¡Algunas inéditas!
El viernes 23 de octubre hemos tenido acceso a una nueva encuesta del CEO (Centro de Estudios de Opinión), la Encuesta Sociopolítica 2020.
Es una encuesta muy en la línea de lo que son los Barómetros de Opinión Política que regularmente hace el CEO, pero que presenta algunas singularidades, como son un grupo de preguntas vinculadas al tema Covid-19, también el tratamiento diferente, innovador, de alguna de las preguntas clásicas del BOP y, finalmente, un tema nada menor, como es que el trabajo de campo de la encuesta está hecho con llamadas telefónicas, mientras que el BOP del CEO se hace con entrevistas «presenciales».
Es una encuesta muy interesante y muy sólida, como todas las que hace el CEO, pero también es una encuesta de la que debemos ser prudentes en su comparabilidad evolutiva con los BOPS justamente por esta diferente metodología para hacer el trabajo de campo, telefónica vs entrevista presencial.
- Visión general:
Comenzaremos el análisis de esta encuesta del CEO «Sociopolítica» por las grandes conclusiones. La encuesta evidencia lo que ya hace mucho tiempo evidenciamos, es decir, un escenario de gran estabilidad en las grandes cuestiones políticas de nuestro país. Aquello de «todo el pescado vendido». No observamos ningún cambio mínimamente significativo. Esto también vale en cuanto a la proyección electoral: seguimos donde estábamos, con lo que podríamos considerar un empate técnico entre ERC y Juntos por Cataluña, con la posibilidad de hacer una mayoría alternativa a la independentista, con un nuevo tri o cuatripartito (ERC, Comunes, PSC y CUP) y con una descomposición del espacio unionista difícil de predecir, a estas alturas, como acabará, pero que sí apunta algunas evidencias.
Finalmente, y en relación a las cuestiones más innovadoras de la encuesta, también evidenciamos, y es una de las cosas que trataremos con más profundidad, las dificultades crecientes que tiene el independentismo para trazar una estrategia compartida entre las diferentes fuerzas políticas independentistas, y por extensión, cívicas y sociales.
- Sobre la proyección electoral:
Ya saben que la proyección electoral es la parte que siempre considero menos interesante de cualquier encuesta política, pero entiendo es la más mediática y que más interés despierta.
La encuesta sociopolítica del CEO confirma, en un escenario político cambiante, los grandes ejes del escenario político en Cataluña:
1.1. En cuanto al independentismo, se confirma la proximidad del empate técnico entre ERC y Juntos por Cataluña y un pequeño ascenso de la CUP.
Hasta ahora ERC mantiene la posición líder en intención de voto, y esto es en sí mismo una noticia, dado el desgaste en las redes que parece sufrir, pero Juntos x CAT, desde el anuncio del President Puigdemont de impulsar el nuevo proyecto político, ha ido avanzando posiciones, hasta situarse a las puertas de este empate técnico.
La suma de ERC y Juntos por Cataluña proyecta un intervalo de diputados entre 66 y 68. Es muy curioso, y espero que tanto a ERC como JxCAT lo vean, que 66 es el mismo número de diputados que alcanzaron el 21D. Puede variar cómo se lo distribuyen entre ellos, pero eso es todo. El votante independentista es el que es y el grueso del voto independentista que fluctúa lo hace entre ERC y JxCAT. No nos hagamos películas con ampliaciones de base…
Pero sí hay un dato que de todas las de la encuesta podría ser la más capital y decisiva de todas para estar en mejores condiciones de hacer la independencia, y es que en el intervalo máximo de la horquilla de la proyección de diputados a ERC y JxCAT, pueden llegar a los 68 diputados, es decir, la mayoría absoluta.
Y que ERC y Juntos por Cataluña o Juntos por Cataluña y ERC puedan sumar mayoría absoluta es, desde mi punto de vista, el dato más relevante e importante para hacer la independencia. La gran mayoría de males del proceso independentista son consecuencia directa de que la suma de ERC y JxCAT no haya tenido mayoría absoluta. El que el 27S 2015 cuando Juntos por el Sí no logró mayoría absoluta, y pasó a depender de la CUP, dinamitó la necesaria fortaleza, solidez, que debe tener la dirección de cualquier movimiento de liberación nacional. Desde el 27S, y justamente porque ERC y Junts no han tenido nunca mayoría absoluta, aunque la tenían al alcance, este hecho se ha convertido en la mayor causa de desgaste del independentismo, porque desde ese momento dejamos hacer independentismo, y sólo hemos podido hacer supervivencia parlamentaria.
La CUP, en vez de sumar lealmente, respetando la correlación de fuerzas dentro del independentismo, siempre ha ejercido el chantaje: para poner y quitar presidentes, para pasarse por el culo los pactos a los que llegaba con las otras fuerzas independentistas, y por no tener ningún problema en votar sistemáticamente con Ciudadanos, PSC y PP contra el gobierno independentista, sólo para desgastarlo, sin siquiera un milímetro de lealtad o complicidad.
Y esto ha sido, es y será, uno de los mayores problemas que tiene el independentismo para hacer la independencia. La CUP es necesaria en el «nosotros» por la independencia, pero es un permanente obstáculo para hacer la independencia.
Que la suma de diputados de ERC y JxCAT que proyecta el CEO pueda tener mayoría absoluta sería probablemente la mejor noticia para el independentismo desde el 1-O. No hay nada que pueda ayudar más a empujar por la independencia y para hacer la independencia que este hecho, la mayoría absoluta de ERC y JxCAT.
El crecimiento de la CUP es importante para sumar% de voto independentista, pero se debe más a la proyección de crecimiento de la abstención que a que la CUP crezca en voto.
En cuanto al resto de opciones en el ámbito independentista o nacionalista catalán, ni rastro. Y eso también es otra constante con todas las encuestas que estamos conociendo. Ni Pdecat, ni PNC, ni Primarias, ni FNC ni nada de nada. Todo irrelevante.
1.2. en cuanto al unionismo su fuerza global más o menos se mantiene, aunque quizás algunos escenarios pueden apuntar retroceso, pero este mantenimiento global se produce con unas enormes sacudidas internas.
La megasacacudida es el desmoronamiento de Ciudadanos, que recordemos ganó las elecciones del 21D. Ahora puede perder hasta 20 de los 36 escaños que obtuvo el 21D. Hasta ahora, en voto decidido, los restos de Ciudadanos se distribuyen entre PSC como principal heredero (con un 9,1% del voto de Ciudadanos del 21D), PP (con un 5,7%) y Vox (con un 3, 4%). Pero el principal dato es este 22,7% de votantes de Cs del 21D que dicen NS/NC, en lo que es el mayor porcentaje de todo el panorama político. Si le añadimos el 12,5% de antiguos votantes situados en «otras opciones», vemos que casi un 35% de antiguos votantes Cs están en una especie de limbo en relación a su voto. Y ello al margen de que sus ex-votantes son los que lideran la abstención declarada, con un 5,7%. Ningún otro partido tiene tantos ex-votantes que explícitamente dicen se abstendrán.
El PSC sí parece que se posiciona como la opción del voto útil unionista, pero no con la fuerza que necesitarían para ser alternativa a nada. Sin embargo, a pesar de no recoger apoyos suficientes como para liderar el unionismo ofreciendo una imagen alternativa al independentismo, no podemos menospreciar que la estrategia radicalmente unionista del PSC les esté dando frutos: recogen un 9,1% de voto de Cs, un 3,2% de los Comunes y un 4.5% del PP. La pluralidad de estos porcentajes es lo que evidencia que se han convertido en el voto útil unionista.
VOX está ahí, y con toda seguridad entrará en el Parlament, porque también recoge, aunque con menor intensidad que el PSC, voto de todos los demás partidos unionistas: un 3,4% de Ciudadanos, un 2,1% de los Comunes y un 9,1% del PP. Sólo no recoge del PSC, justamente por lo que explicábamos en el párrafo anterior, que el PSC es la fuerza tractora del unionismo en estas elecciones.
Una de las buenas noticias de la encuesta es la descomposición de los Comunes, con sólo un 50% de fidelidad de voto, y voto que se le va hacia PSC y VOX. Sus fronteras ideológicas acaban imponiendo un escenario que como mucho les puede hacer repetir resultados, si su % de antiguos votantes ahora indecisos, que es el más grande de todos los partidos políticos, no sigue la fuga hacia sus fronteras naturales del PSC y de VOX.
- Sobre la relación con España: autonomía, referéndum, independencia.
Hace mucho tiempo que la evidencia de lo que la sociedad catalana piensa en relación a estos temas es muy sólida, tan sólida como petrificada.
– la mayoría (60%) de catalanes cree que Cataluña tiene un nivel insuficiente de autonomía
– la inmensa mayoría de los catalanes cree que los catalanes tenemos derecho a decidir nuestro futuro en un referéndum: el 76,3%, o sea 3 de cada 4 catalanes, porcentaje al que se llega porque hay un 26,4% de votantes de Ciudadanos que así lo creen (sí, 1 de cada 4 votantes de Cs), un 63% de los votantes de PSC, un 70% los votantes de los Comunes, un 32% de los del PP e incluso un 22% de los de VOX!!!!!
– la estabilidad en el apoyo a la independencia, en si el encuestado quiere o no quiere la independencia, también es muy grande. Hay oscilaciones de una encuesta CEO a otra, pero casi siempre dentro de los márgenes de error de la encuesta. En esta encuesta que ahora estamos comentando, un 45,5% Sí quiere la independencia y un 46,3% No, es decir, empate «técnico» en eso de querer la independencia o no. El último BOP el No era del 50% y el Sí del 42%. Ni entonces estábamos en claro retroceso ni ahora en ascenso. Son datos que tenemos que mirar en evolución temporal larga, y vemos que siempre se mueven en estos parámetros de porcentajes.
– antes de preguntar sobre si se quiere o no la independencia, la encuesta pregunta, después de haber preguntado sobre el nivel de satisfacción con el autogobierno, cómo le gustaría al encuestado que se articulara políticamente la relación entre Cataluña y España.
También en los resultados de esta pregunta hay una gran estabilidad en relación a los anteriores BOP del CEO. Sin embargo, en esta pregunta, para esta encuesta, es donde el CEO ha introducido una novedad que merece la pena comentar.
Pregunta el CEO si cree que en la relación CAT-ESP Cataluña debería ser como una Comunidad Autónoma, un Estado dentro de una España Federal o un Estado independiente.
El 35,4% de los encuestados dicen que un Estado independiente, es la respuesta mayoritaria, seguida de un 29,5% que creen que debemos seguir siendo una comunidad autónoma, y, con casi el mismo porcentaje, tenemos el 29,3% que creen deberíamos ser un Estado dentro de una España Federal.
En esta pregunta de respuesta múltiple, cuando miramos la respuesta única el Estado independiente gana, pero ya vemos que sin mayoría absoluta, con un 35,4%. La innovación de esta encuesta sociopolítica del CEO ha sido preguntar a los encuestados qué querrían como «segunda opción».
Y aquí vemos cómo entonces un Estado dentro de una España federal arrasa, con un 74,1% de (suma 1 y 2), seguido de la opción Comunidad Autónoma (50,1%). Y el Estado independiente que era la primera en única respuesta, ahora es la tercera, con un 48,7%.
Y es muy interesante esto que ha hecho el CEO porque desmonta toda esta patraña de los «federalistas» que dicen serlo entre Comunes y PSC, porque la mayoría de ellos si les «aprietas» un poco, se delatan de que prefieren ser una comunidad autónoma antes que un Estado independiente.
Pues eso es lo que hay. Así están las cosas. Lo digo por los independentistas que se pasan el día recogiendo las babas de la Colau y los Comunes…
- Sobre la gestión del post 1-O.
Es sólo una pregunta, la que por primera vez el CEO ha planteado, en esta encuesta «sociopolítica», pero es muy interesante.
Con independencia de cómo nos posicionamos, lo que votamos, etc. creo que todos estaremos de acuerdo en que una de las cosas más traumáticas dentro del movimiento independentista ha sido la gestión de todo lo que siguió al 1-O.
Sin plantearlo exactamente en estos términos, sí se entiende del todo la pregunta que hace el CEO, que pregunta cuál cree el encuestado que es la mejor opción en relación a la situación entre CAT y ESP. Y el CEO plantea 3 opciones posibles:
– ser una comunidad autónoma de España
– pactar un referéndum con el Estado español
– declarar la independencia unilateralmente
Y en lo que es un muy interesante planteamiento demoscópico, pregunta a los encuestados cuál es, en primera opción, su opción, pero también cuál sería su segunda opción.
Sobre las respuestas en primera opción, es decir, las principales, está claro que la DUI, como tal, como opción política para salir de la actual situación, no es la opción mayoritaria de nuestros ciudadanos: sólo un 15,4% dicen que lo que hay es hacer una DUI. Recordemos que estos mismos encuestados han dicho, con un 45,5% que quieren la independencia. O sea, entre los que quieren la independencia, según la encuesta (fiable) no llegan a la mitad los que quieren la DUI.
La mayoría social querría un referéndum pactado con el Estado Español, un 51,9%.
Claro, yo también lo querría. Por eso es importante lo que plantea el CEO de «¿y en segunda opción?». Pues cuando miramos la suma de primera y segunda opción vemos que la DUI la apoyarían un 37,3% de los catalanes, es decir, 20 puntos más del apoyo que tenía en primera opción. Estos 20 puntos son de gente que dice querer prioritariamente el referéndum, pero si no puede ser, pues la DUI.
Pero sin embargo, seguimos viendo como este 37,3% que suman la primera y segunda opción sigue sin llegar al 45,5% que dicen querer la independencia.
En la suma primera y segunda opción el referéndum alcanza el 82% y la Comunidad Autónoma el 51,7%.
Este es un tema de muy difícil gestión para el independentismo, pero en el que debe ponerse. Son dos opciones que a priori parecen difícilmente conciliables. Pero algo tendremos que hacer. O corremos el riesgo de hacernos daño y ser incapaces de construir una mínima estrategia compartida.
Fijémonos en esto:
– los votantes de ERC son los que más claro lo tienen, los que más han «comprado» el discurso que está haciendo su dirección, hasta el punto que es un 73,6% de los votantes de ERC los que de entrada quieren la opción referéndum, por tan sólo un 20,9% que se manifiestan por la DUI.
– en cambio los votantes de Juntos por Cataluña y de la CUP están absolutamente divididos en sus opciones:
– un 49,7% de los votantes de JxCAT están por la DUI, pero un 45,4% por el referéndum
– un 49,1% de los votantes de la CUP están por el referèndum, pero un 47,2% por la DUI
No es este artículo el lugar ni el momento para entrar a analizar las implicaciones que tienen estos datos. Hoy sólo apunto que las implicaciones que hay en ellos, que los datos son muy complicados de procesar en términos políticos, que si no lo hacemos bien nos podemos ver abocados a escenarios políticos de permanente colisión y de incapacidad de construir ninguna estrategia compartida. El reto que tenemos por delante es extraordinario. Muy, muy complicado de gestionar.
- Sobre los liderazgos y la «sectarización» electoralista que algunos, y a los datos me remito, promueven:
La pregunta sobre la valoración de los líderes políticos es una de las favoritas de los medios de comunicación, porque les permiten jugar a lo de los buenos y los malos.
Les encanta, a todos, esto de poder titular «Oriol Junqueras es el líder político mejor valorado, por encima de Puigdemont».
Y claro, es cierto, sumado todo, es así. Pero la cosa es que detrás de este dato final lo que hay son muchas otras cosas, mucho más importantes, que explican el dato final, pero sobre las que no se dice nada.
Y estas cosas que son las que determinan el dato final, pero que no se explican, es lo que hoy, para terminar, quisiera explicar.
Efectivamente, Oriol Junqueras es el líder político mejor valorado de todos, de hecho el único que aprueba, con una valoración media de 5,72. Detrás de este dato, que es así, hay dos grandes cuestiones políticas que lo explican: la derivada de la mejor valoración que tiene Oriol Junqueras entre los votantes unionistas, en comparación con otros líderes indepentistas, y la evidencia del impacto de la política «sectaria» que practica buena parte de la dirección de ERC y la práctica totalidad de sus voceros mediáticos. Veámoslo:
4.1. La valoración diferencial de los votantes unionistas en relación a los líderes independentistas: todos los votantes de todos los partidos unionistas, todos, valoran mejor a Oriol Junqueras (OJ) que a Carles Puigdemont (CP). Así, los de Ciudadanos valoran con un 2,69 a OJ y con un 1,26 a CP, los del PSC con un 4,18 a OJ y con un 1,47 a CP, los de los Comunes con un 5,51 a OJ y con un 2,86 a CP, los del PP con un 1,82 OJ y con un 1,19 a CP e incluso los de VOX, con un 0,66 a OJ y con un 0,22 a CP.
No hay excepción entre los votantes de las fuerzas políticas unionistas.
Algunos pueden hacer una lectura de esta valoración diferencial en clave positiva, que OJ es capaz de tejer más complicidades, que no genera tanta oposición.
Pero otros pueden hacer otra lectura, como OJ representa la rendición, mientras que CP es el enemigo a batir, el enemigo público número 1 del unionismo
4.2. La evidencia del impacto de las estrategias y políticas sectarias y divisivas de una parte de la dirección de ERC y de la mayoría de sus voceros mediáticos es demoledora. En este despropósito divisivo en el que estamos instalados siempre existe el recurso al «y tú más», el «quien esté libre de culpa que tire la primera piedra» y tal, o sea, a intentar hacer ver que el sectarismo es de todos y en relación a todos.
Pero la encuesta del CEO, ésta y todas las anteriores que hemos conocido, desmonta totalmente esta «generalización» de las responsabilidad, e identifica claramente el resultado entre los electores de los mensajes sectarios de esta parte de la dirección y de los voceros mediáticos de ERC.
Fijémonos:
– ¿cómo valoran los votantes de JxCAT a OJ? Pues con un 6,99. ¿Y a Marta Rovira? Pues con un 6,80. ¿Y los de ERC a CP? Pues con un 5,93.
– ¿cómo valoran los votantes de JxCAT a Quim Torra? Pues con un 8,30. ¿Y los de ERC? Pues con un 5,97
¡Se puede ver claramente cómo los votantes de JxCAT valoran siempre más positivamente a los líderes de ERC, que los votantes de ERC a los líderes de JxCAT! ¿Por qué? Por el desgaste sectario incesante que en su electorado machaca todo este personal de la secta del Sol de la dirección de ERC.
La cosa sectaria llega, sin embargo, a niveles preocupantes cuando vemos que fruto de todo lo que hace la secta del Sol, los votantes de ERC prácticamente valoran igual a represores como Salvador Illa y Jèssica Albiach que repremidos. Así los votantes de ERC valoran con 5,21 al ministro Salvador Illa y con un 5,01 a Jèssica Albiach. O sea un ministro del Gobierno de España y su represión, sólo 0,7 por debajo que el President Puigdemont, en el exilio por la acción represiva del Estado y sólo 0,6 que el President Torra, inhabilitado por la acción represiva del Estado.
Es muy fuerte. La secta del Sol blanqueando a los represores y criminalizando a los reprimidos. Los datos son bastante evidentes.
- Por ética y estética, también acabo con otra valoración global:
Ya han visto que la encuesta sociopolítica del CEO tenía muchas cosas y muy interesantes. Cuando hago estos análisis lo que quiero es compartir con todos ustedes mi visión, a partir de mi experiencia en el tratamiento de datos, también demoscópicos. Pero evidentemente todo bajo el tamiz de mi opinión comprometida en favor de la independencia. Tenemos mucho trabajo por hacer. Pero lo podemos hacer. Tenemos muchos riesgos por delante, no sólo externos, represivos, sino riesgos generados por nosotros mismos, por los independentistas, partidos, entidades, militantes, etc.
Me gustaría mucho que todo el mundo viera, en este análisis, las oportunidades que tenemos por delante. Y trabajemos para aprovecharlas.
Pero, tal y como están las cosas, casi me conformaría si este análisis sirve para evitar que caigamos de cabeza en los escenarios de gran riesgo que he identificado.
Sólo podremos ser independientes si estamos todos, si somos capaces de asumir y blindar el «nosotros»y una estrategia compartida.
Vamos a por ello.
DONEC PERFICIAM (1)
(1) https://es.wikipedia.org/wiki/Donec_Perficiam
RACÓ CATALÀ