¿Independentismo no nacionalista?

El ataque que el Estado español está llevando a cabo desde muchos estamentos e instituciones contra el Fútbol Club Barcelona –no pierdan el tiempo en los detalles que lo importante es que se trata de esto– me lleva a uno de esos tópicos que quiero desmontar: el independentismo no-nacionalista o uno de los mayores errores que ha cometido el movimiento independentista. En resumen: unos para promocionarlo y otros para no defender la posición y exhibir acomplejamiento e incapacidad para adaptarse a los nuevos tiempos. No es de ahora ni de ahí. Viene de hace varios años atrás y diría que se inspira en el País Vasco, donde la izquierda aberzale en su día renunció a utilizar la ikurriña y el himno den sus actos de tan asociados que éstos estaban en el PNV. Evidentemente, algún día llevaremos a revisión la ‘vasquitis’ que ha tenido y tiene el independentismo catalán. Lo digo reconociendo que me dieron esta información durante un mitin de Ibarretxe en una época en la que invertimos muchas horas por el Galeuscat. Bueno, el caso es que quizá por una necesidad de marketing político como es diferenciarse no se ha renunciado a la nación –¡sólo faltaría!, porque algo debes querer que se convierta en Estado–, pero se ha querido renunciar al nacionalismo y marginarlo. Esta palabra tiene complejidades a nivel internacional, cierto. Pero si eres una nación oprimida por un Estado que quiere aniquilarte defender lo que te identifica como comunidad es un deber: territorio, símbolos, valores, identidad… Despistarse de la importancia que tiene esto nos ha llevado a asumir, por ejemplo, que para ampliar la base el independentismo debía expresarse en castellano. Quien se opuso fue acusado de nacionalista y la mayoría se calló. Enhorabuena, ahora todo el mundo a correr. Por suerte, están emergiendo voces nuevas y desacomplejadas, de una nueva generación, a las que no les da miedo decir las cosas por su nombre ni les da miedo que las califiquen de vete a saber qué. Defienden la nación: el territorio, la lengua, los símbolos.

EL PUNT-AVUI