La impunidad sobre los crímenes cometidos en el pasado tiene unos graves efectos multiplicadores sobre el comportamiento de los actuales responsables de las vulneraciones de derechos
Desde la plataforma de asociaciones para la recuperación de la memoria histórica de Euskal Herria Lau Haizetara Gogoan, hemos insistido en la necesidad de establecer medidas para que no se repitan las situaciones del pasado franquista de vulneraciones de derechos humanos, civiles y políticos, tanto individuales como colectivos. Hoy, y ante las últimas detenciones masivas, persecución de ideas y proyectos, desapariciones como la de Jon Anza, queremos insistir en el cumplimiento de esta ineludible condición, para conseguir la definitiva anulación de las herencias de ese pasado.
Las garantías de no repetición, como parte sustancial de la reparación, son un elemento determinante para la superación de regímenes autoritarios como el franquista. En este sentido, son clarificadores los informes y principios emitidos por las Naciones Unidas (1996 y 2005) en los que se definen taxativamente los mecanismos de garantías para que los ciudadanos, pueblos y naciones sometidos por las dictaduras puedan superarlas a través de la articulación de nuevas bases sociales, políticas, legales e institucionales que eviten la reproducción de situaciones de vulneraciones de derechos humanos, civiles y políticos. En este sentido, el Principio nº 23 del citado informe de
La necesidad de establecer de manera explícita estos principios, que venían siendo recogidos en las distintas convenciones internacionales (Ginebra, 1906 y 1929; estatutos del Tribunal Militar Internacional de 1945, y de
Como resultado de estos pactos y leyes, tenemos que en lugar de solucionar las cuestiones ligadas a la investigación de la verdad, la realización de la justicia y la implementación de medidas de reparación, se consigue asentar, aún más si cabe, las actuaciones criminales de los responsables del régimen franquista y el terrorismo de estado, perpetuándose en sus comportamientos y leyes. Ante esta situación,
El modelo de impunidad español ha impedido establecer cualquier sistema de garantías de no repetición, en la medida en que las estructuras e ideario de la administración del Estado del régimen anterior, se han mantenido incólumes. Impunidad verificada en la permanencia en el poder (civil y militar) y la administración del Estado de personalidades adictas al régimen franquista y causantes, en definitiva, del genocidio y los crímenes de lesa humanidad cometidos por él.
La impunidad y la ausencia de las garantías de no repetición, protagonizaron el proceso político que se dio en denominar «transición». Ésta ha sido y es la causa fundamental de la persistencia de las vulneraciones de derechos humanos fundamentales que se están materializando, al modo en que se produjeron bajo el franquismo, en leyes de persecución de ideas, organizaciones políticas, instituciones socio-culturales; en detenciones preventivas e incomunicadas de carácter masivo, en la ausencia de medidas efectivas para evitar la tortura; en la negación del derecho a la autodeterminación; en cierres de medios de comunicación…
La impunidad sobre los crímenes cometidos en el pasado tiene unos graves efectos multiplicadores sobre el comportamiento de los actuales responsables de las vulneraciones de derechos, en la medida en que éstos, mirándose en el espejo del pasado, perciben que, hoy por ti mañana por mí, todo quedará en la casa grande, oculto en los oscuros vericuetos del Estado. Pues no, esta vez no. Ni olvido ni silencio. Sobre el fascismo de ayer y los brotes verdes de hoy, verdad, justicia y reparación, incluidas las garantías de no repetición.
Gotzon Garmendia, Manu Sainz, Andoni Txasko (*) Plataforma Lau Haizetara Gogoan
(*) También firman este artículo los miembros de Lau Haizetara Gogoan Alberto Muñoz, Ramon Gaztelumendi y Juan Ramon Garai